Ya que tienes instalada una piscina tanto en tu casa como en tu negocio ¿por qué no sacarle provecho durante todo el año? Ah claro, puedes pensar: ¿y quién va a querer bañarse en ella en invierno con temperaturas que pueden rozar o estar por debajo de los cero grados? También puedes tener el agua de tu piscina caliente gracias a calentadores para piscinas. ¿Los conocías?

Imagina la satisfacción de poder relajarte en tu piscina privada en pleno invierno con agua caliente. O sacarle mayor rédito a tus instalaciones y a tu piscina ofreciendo su servicio a tus clientes también durante los meses más fríos del año. Puedes hacerlo gracias a calentadores para piscinas. Y entre éstos destacan dos, los calentadores eléctricos y los calentadores de gas. ¿Cuál elegir? Todo va a depender de las necesidades que tengas, de tu ubicación geográfica, de tu instalación eléctrica o de tu presupuesto.

Calentador eléctrico para piscinas

Sin duda esta es la opción más habitual para aquellos que quieran tener una piscina con más usabilidad durante todo el año, los calentadores eléctricos se colocan sobre el circuito de filtración de la piscina consiguiendo que la temperatura de la piscina suba y se mantenga uniforme durante unos 5 días de manera continua. Mientras que el termostato lo que hace es asegurar la regulación de la temperatura.

No es necesario grandes obras para instalar un calentador eléctrico para piscinas aunque sí que es verdad que a nivel de facturación eléctrica puede provocar alguna que otra sorpresa por lo que se recomienda utilizar los calentadores en las franjas horarios donde haya disminución de la tarifa económica.

Calentadores de gas para piscinas

Los calentadores de gas en piscinas prácticamente funcionan igual que un calentador eléctrico pero sí que es verdad que son algo más caros aunque ofrecen un coste de utilización inferior a las calderas eléctricas. Funcionan, digamos, como las calderas clásicas de toda la vida.

Los calentadores de gas están recomendaos en el caso de que queramos agua calienta en la piscina de manera puntual como estancias cortas o fines de semana y su coste de utilización queda bastante bajo no así el de instalación que es más destacado.

¿Cómo funciona un intercambiador de calor?

Éste se coloca sobre la instalación de la caldera de la casa calentando al instante el agua de la piscina siendo una solución idónea si la piscina no se encuentra demasiado lejos de casa. Los no se mezclan, mientras que la temperatura de la piscina depende de la potencia de la caldera. Si esta última es bastante potente, la subida en temperatura de la piscina es generalmente muy rápida, 2 días máximos, con la filtración en continuo.

¿Qué son las bombas de calor para piscinas?

Esta opción para calentar el agua de la piscina es mediante las bombas de calor que lo que hacen es captar el calor del aire y transmitirlo al agua de la piscina. La subida en temperatura de la piscina es de 2 a 5 días con la filtración en continuo. Su instalación es simple: al circuito de agua y a la corriente eléctrica.